A partes iguales



Todo hubiese sido diferente si aquel día hubiese amanecido a la hora de costumbre.
Si había algo que odiaba era el empeño del ser humano por tener todo bajo control y decidir a que hora sale el sol según su conveniencia.Ese 29 de Marzo amaneció una hora antes.
Se despertó refunfunñando y entre dientes se lamentaba de que le habían robado una hora de aquel domingo,los niños dormían y sus arrastrados pasos le condujeron hasta la cocina donde un espeso café esperaba desde el día anterior para ser recalentado.Un golpe de tos le recordó que la noche anterior fumó como nunca y volvió a repetirse en voz baja,como un lamento,"tengo que dejar de fumar",a la vez que encendía el primer cigarrillo del día.
En un acto reflejo puso en marcha el portátil ingiriendo cafeína y nicotina a partes iguales,abrió el correo y mientras revisaba todo lo que había recibido,una ventanita abajo,a la derecha de la pantalla se abre y le saluda.....Hola.Como estas?
Hoy todo seria diferente si días antes de aquel 29 de Marzo,con miedo e ilusión a partes iguales no hubiese lanzado aquella invitación.