Yo decido

Al ver la imagen con la cual la iglesia pretende ultimamente convencernos de su postura frente al aborto,propongo otra imagen, en la que se ve un señor vestido de largo color blanco con coche blindado, avión propio y guardaespaldas,el cual vive en una residencia nada modesta con sirvientes y médicos particulares y al lado la imagen de un niño del tercer mundo preguntándose ¿y yo?.

Me viene a la mente las noticias de niños maltratados hasta la muerte,o recién nacidos dentro de bolsas de basura en contenedores,eso sin hablar de los que son violados por sus padres.

Cuando una mujer decide abortar no lo hace por capricho y seguramente es algo que se aleja bastante de algo agradable.

Es fácil decidir por una persona a la cual no conoces y su vida no te importa nada,desde un despacho y con un sueldo que ni en sueños ella podrá tener,y con la vida resuelta mientras que para ella el futuro se le presenta incierto.

Lo único que reivindico es el hecho de poder decidir nosotras, sin miedo a ser ajusticiadas ni juzgadas por la sociedad , los políticos y la iglesia que se dediquen a otras cosas.