Porque el tiempo es preciso y las palabras casi siempre certeras, aunque no siempre abundantes o constantes. De pequeño tenía una duda razonable, que nunca me supieron explicar y que nunca quise preguntar; tenía la insatisfacción de no saber por qué la gente guardaba su dinero en los bancos. Ahora, ya un poco mayor, más feo, más triste y más hijo de puta, sigo sin entender por qué la gente guarda el dinero en los bancos. Ya no me hace falta preguntar, ahora sólo me echo las manos a la cabeza.
El don de la honestidad quedó alejado de nuestros genes, es uno de esos eslabones que no se pueden recuperar, que quedan perdidos como desechos de la evolución. El gen blanco, claramente en ventaja con respecto al negro, quiere gobernar el mundo, pero tiene un gran problema, son pocos y cobardes. La vergüenza de pelearte con algo más que tus manos, nos ha catapultado al régimen de los sinvergüenzas. Enciende la televisión.
Yo en verano me voy por las sombras mientras la gente vegeta al Sol. Parecen plantas. No están verdes pero si quieren estar morenos, pero les da asco la gente negra. ¿Será por su color? Les quitamos el dinero, les vendemos armas, inventamos sus desgracias y los que pueden, son felices, nosotros sólo buscamos la felicidad. He visto perros más listos.
Y mientras el mundo ahoga sus penas ahorcando a los demás, la gente buena muere a veces demasiado pronto Mientras las muertes simples pasan de largo, hay que vigilar que no sea capaz la naturaleza, de ocurrírsele devolver, todas las patadas en el culo que está recibiendo.
Intento plagiar al bueno de Ginsberg, pero las comparaciones son odiosas, las letras diferentes y el estilo,... ¿Qué estilo?